El solsticio de invierno es la noche más larga del año. En tiempos pasados, la oscuridad nos invitaba a descansar, a pasar tiempo en nuestros nidos y a entrar en nuestro interior para reflexionar sobre la experiencia del ciclo que estaba a punto de cerrarse. Ésto es vital para nuestro bienestar, pero la sociedad moderna nos presiona para que no lo hagamos y nos atrae hacia el consumismo, el gasto excesivo, el exceso de vida social, el exceso de comida y de bebida.
Formamos parte de la Naturaleza y, si observamos el resto del mundo natural, veremos que la savia de los árboles deja de fluir y que para muchos animales es una época de hibernación. Nuestro cuerpo, mente y espíritu necesitan desesperadamente este tiempo de descanso y, si no nos proporcionamos este espacio de tranquilidad, podemos encontrarnos sufriendo resfriados y sintiéndonos amargados por el tiempo invernal. El frío también nos invita a buscar un espacio de calidez, suavidad y paz para reflexionar y abrazar el año saliente.
¿Y tú? ¿Te sientes en sintonía con el resto del mundo natural? Trabajar creativamente con materiales naturales puede ayudarte a alinearte. Mi actividad creativa favorita en esta época del año es crear un tronco de Navidad.
¿Qué es exactamente un tronco de Navidad? Hace mucho tiempo, en el lejano, lejano norte, un tronco de Navidad era un gran tronco de árbol que se llevaba a la casa y se echaba al hogar poco a poco. Hoy en día, en muchos países europeos se puede encontrar un tronco de Navidad, que es un bizcocho enrollado que parece un tronco y sabe delicioso.
Un tronco de Navidad también puede ser un pequeño tronco decorado con un toque invernal. A mí me gusta hacerlo de forma consciente, reflexionando sobre el año transcurrido y decorándolo con materiales que resuenen conmigo. En un tronco de Navidad se suelen encontrar los siguientes elementos naturales:
- Partes de árboles de hoja perenne.
- Palitos de canela: se cree que aumentan los niveles de energía y desprenden un olor encantador.
- Rodajas de naranja secas: energía solar y color brillante; yo prefiero deshidratarlas por mi cuenta.
- Acebo: ofrece protección y coloridas bayas rojas. Cuidado con las hojas espinosas.
- Muérdago: protección, amor y pureza. Cuidado, el muérdago es tóxico para los animales domésticos.
- Piñas: limpieza; repele la negatividad. Se pueden pintar para darles más color.
- Granadas: abundancia, energía solar, sabiduría del inframundo.
- Aceites esenciales: naranja, canela y clavo se asocian a esta época del año.
- Cuerda, lana roja
Presta atención a dónde encuentras estos elementos. ¿Son ecológicos? ¿Son de origen local? Si no estás seguro, puedes emborronarlos antes.
A la hora de elegir el tronco que vas a utilizar, es posible que prefieras utilizar una madera concreta por sus propiedades.
- El aliso es bueno para sentar las bases y la fuerza vital. Ayuda a tomar decisiones.
- El fresno es bueno para la paz, la conexión y los viajes astrales. En la mitología nórdica es el árbol del mundo.
- El álamo temblón es bueno para superar miedos, el duelo y la conexión con los antepasados.
- El abedul se asocia con la creatividad, la limpieza y los nuevos comienzos.
- El avellano es conocido por la sabiduría, la inspiración y la adivinación; a menudo se utiliza para fabricar varitas mágicas.
- El acebo es conocido por el desafío, la defensa y la protección.
- El roble es símbolo de fuerza, sabiduría, resistencia, aguante y seguridad.
- El pino se asocia con la objetividad y la dirección clara.
- El serbal es conocido por sus cualidades mágicas. Se utiliza para la protección y la fuerza vital.
- El sauce es conocido por su belleza, flexibilidad e intuición. Es un árbol liminal y ayuda a conectar con las emociones.
- El tejo se asocia con las transiciones y los ciclos de principios y finales. Cuidado, que el tejo es tóxico.
Instrucciones
- Conecta con un tronco y, si es posible, déjalo en tu altar o espacio sagrado durante unos días mientras reúnes los elementos necesarios para decorarlo.
- Limpia energéticamente el tronco quemando una varita de sahumerio o un poco de incienso a su alrededor.
- Establece una intención. Deja que tu mente recorra tus experiencias del último año. ¿Qué es lo que ya no te sirve? ¿Qué puedes soltar para quemarlo en el fuego y abrir espacio al nuevo ciclo?
- Sujeta los distintos elementos al tronco. Yo suelo hacerlo con cuerda natural y decorar con lana roja. Si no vas a quemar el tronco, puedes utilizar una pistola de pegamento.
Qué hacer con el tronco de Navidad
Hay quien lo utiliza como centro de mesa natural durante las fiestas. Si tienes una chimenea o un quemador exterior, puedes decorar el tronco la noche del solsticio de invierno y quemarlo durante las fiestas.
Yo suelo quemar el mío en Nochevieja para empezar el Año Nuevo más ligera. Esparce las cenizas sobre plantas o flores, para que surja nueva vida de lo que ya no necesitas.
Si no tienes acceso a un fuego, puedes hacer unos agujeros y añadir una o varias velas y hacer tu ritual con las llamas de las velas.
Sea lo que sea lo que decidas hacer con tu tronco de Navidad, espero que disfrutes de tu creatividad y tengas un solsticio de invierno lleno de paz y significado.